¡Hola! ¿Qué tal estás? Espero que muy bien y si no recuerda que ¡todo pasa!
Hoy vengo a decirte algo muy importante que, seguro que lo necesitas y si no lo necesitas ahora, en algún momento lo has necesitado o lo vas a necesitar y si no lo necesitas nunca, ¡enhorabuena!
Hay veces que necesitamos escuchar palabras bonitas hacia nosotros, yo diría que siempre y la verdad es que no es algo que esté a la orden del día. Siempre estamos acostumbrados a recibir e incluso a dar críticas algunas constructivas y otras no. Y sobre todo pasamos por alto lo esencial, lo que somos sí o sí hagamos lo que hagamos. Y como es evidente y como es lo “normal” no hace falta destacarlo. ¿Pero eso quien se lo ha inventado? Jaja.
Porque, si tengo una espinilla en la cara, es evidente, me la veo yo, me miro al espejo y la veo y ahora viene alguien y me dice: ¡anda! ¡Te ha salido una espinilla! Y tú piensas ¡ah gracias! ¡No lo sabía! Jaja ¿no? Es algo evidente y aun así lo decimos. ¿Para qué? Lo desconozco. Pero es algo que nos pasa a todos, tanto para recibirlo como para darlo.
Y si una espinilla se ve y es evidente y no aporta ninguna información y se dice. Cuando hay otras cosas que son evidente y sí que aportan porque son tan evidentes que a veces se pierden, ¿por qué no se dicen?
Pues hoy vengo a decir lo evidente que eres, hoy vengo a decirte el ser humano grandioso que eres. Hoy vengo a decirte que, aunque hayas fallado en algún momento o tú creas que hayas fallado o que no lo has hecho lo suficientemente bien como te hubiese gustado o como le hubiese gustado al otro. Eso no quita lo maravilloso que eres, eso no quita la divinidad que eres. Eres un ser humano bondadoso, eres un ser humano que se lo merece todo. Eres único, eres importante, eres perfecto con tus imperfecciones. Eres fuerte, valiente, eres luz, todos podemos cometer errores o hay veces que no lo son y si lo son están por algo, para un para qué. Y no pasa nada, porque estamos en un constante aprendizaje, en una constante evolución. Donde se tienen que producir desequilibrios para volver a buscar ese equilibrio. Porque si todo fuese plano, ¡vaya aburrimiento! Y no habría ningún propósito, es necesario el desequilibrio para volver a equilibrarse, para que tenga sentido. Y ante todo, eres divino, viviendo una experiencia humana. ¡Es que eres muy grande!
Puedes con todo, con todo lo que te propongas, simplemente que a veces no puedes con todo a la vez. Pero ¡tú puedes! Todo lo que esté en ti, todo lo que tú desees, todo lo que se te venga a la mente es porque puedes, porque si no, no se te ocurriría. Tú vales y vales muchísimo, infinito y mucho más de lo que te crees. No permitas que alguien te diga algo que no quieres escuchar, algo que no te aporte. Hay veces que igual tenemos que escuchar cosas que no nos gustan tanto, pero si te aportan, vale. Que tengas una espinilla en la cara y ya lo sabes y te lo recuerdan, creo que no aporta nada. Que seas un ser maravilloso y te lo recuerdan, eso sí aporta. Porque eso se olvida, eso no se puede ver como cuando te miras al espejo, eso no es algo tangible.
Así que este mensaje es para ti, para recordarte que eres un ser humano valiosísimo, eres divino, eres poderoso, eres único, eres importante, ERES, no necesitas más, ya ERES, no tienes que demostrar nada, ya VALES, ya ERES. Ahí se resume todo.
Trátate como tal, como alguien importante, valioso, único, maravillo, divino, bondadoso. Somos el único juez que juzga dos veces por lo mismo e incluso más de dos. No te castigues, no te machaques, no mereces eso. Te mereces todo lo bueno que te pase, pero ¡todos! Todos lo merecemos, aunque creas que no. Pero todos estamos hechos de lo mismo, todos tenemos los mismos derechos de que se nos reconozca tal y como somos y el resto son circunstancias y nos llevan a un sitio o a otro y por algo será y para algo será, pero todos somos divinos.
Para cerrar quiero darte las gracias por estar ahí. Gracias por ser tú tal y como eres. Y para acabar, te propongo que te escribas una carta a ti, con lo que te gusta de ti. Este ejercicio lo propuse en el calendario de adviento que hice esta Navidad y escribiendo esto, he recordado que esa carta la tenía, me la escribí a mí misma y quiero compartirla contigo, porque estoy segura de que muchas cosas de las que pongo en esta carta también están en ti. De verdad, te propongo que hagas este ejercicio y cada vez que necesites recurrir a tu carta, ¡hazlo!
Cosas buenas de mí que me gustan y me hacen valiosa.
Soy valiente porque tomo decisiones de manera consciente y atrevida, me subo al primer escalón sin ver la escalera entera. Y esa es la valentía, porque con la acción es como es posible que las cosas sucedan.
Soy constante y perseverante, no me rindo a la primera, si no sale bien lo vuelvo a intentar y si no lo miro con perspectiva para ver más soluciones.
Soy muy consciente de la responsabilidad que tenemos cada uno en el mundo y ante cualquier situación me responsabilizo de lo que es mío, no echo balones fuera. Esto también me libera, porque sé donde acabo yo y dónde empieza el otro.
Me gusta de mí, que me cuestiono todo y eso me da flexibilidad mental y me ayuda a tomar buenas decisiones.
Me gusta de mí, el respeto que tengo hacia el otro, tratándolo con cariño y sin dejar en evidencia o ridiculizarlo.
Me gusta mi optimismo, mi energía positiva, mi alegría, el ponerme como prioridad y cuidarme.
Me hace valiosa la actitud que tengo ante la vida, mi fuerza de voluntad, el compromiso, mi capacidad de aprendizaje.
Soy valiosa y válida por mí misma, por el “simple” hecho de Ser. Soy única, soy importante, soy mágica, soy especial, soy grande, soy creadora de mi realidad.
Te amo, me amo.
Espero que estas palabras las hayas recogido con tanto amor como han salido de mí. Lee esto cada ve que te apetezca, porque lo evidente que aporta no se suele decir, lo evidente y que no aporta sí. Si te apetece, cuando tengas un momento, escríbete una carta a ti, con lo que te gusta de ti, si te salen 3 frases bueno es, más adelante volverás a hacer el ejercicio y poco a poco irás quitándote capas y viendo el verdadero valor que tienes. ¡Te mando un fuerte abrazo y muchísimo amor!
¡Que tengas un feliz día, una feliz semana y una feliz vida!
Comments